jueves, 30 de septiembre de 2010

Ánimo a mí misma

No sé qué tiene Lau, que me empuja a escribir.

Estoy sola desde hace dos días y he tenido tiempo de hablar conmigo misma. Ha sido agradable no liarme a puñetazos con mi yo interior, por primera vez desde hace casi tres meses

Antes de ayer, en el primer día de clase de este curso, uno de mis nuevo profesores nos dijo varias cosas muy crudas, casi hirientes. Pero tenía toda la razón. Ya está bien de lamentarnos, de buscar motivación para vivir en fuentes externas, de justificar nuestra amargura o nuestra inutilidad poniendo como excusa todo lo que tenemos alrededor. Nos guste o no, al mundo le importa un rábano nuestra autoestima. Estemos bien, o estemos mal, se nos exige aportar algo a la sociedad y si el dolor nos bloquea es un problema única y exclusivamente nuestro. En resumidas cuentas, hemos de rendir diariamente y al único al que le afecta, el único culpable y la única salida a nuestra depresión somos nosotros mismos. Es una verdad clarisima que en el fondo ya conocía, pero esa hora en la que el profesor nos habló fue como una bofetada en la mejilla, un zarandeo y un “¡despierta de una vez!”. La chispa de energía de la que creía carecer ya, y que ha servido para darme la fuerza necesaria para ponerme en pie, olvidar mi debilidad y tranformarla en fuerza, que es lo que se espera de mí y, qué demonios, lo que realmente soy. Sí, sufro como todos, pero es cierto que soy fuerte. Soy entera, soy mujer, soy obstinada, ambiciosa, leal, humilde y soberbia, compleja y simple.Soy yo, todo eso y más, sólo necesitaba recordarlo.

Estoy escuchando Lau. Veo a Dante dormitar sobre su baldosa. Miro por la ventana, que tiene la persiana medio bajada. Alcanzo a atisbar los últimos rayos de sol -son las ocho- jugueteando traviesos con los tejados de las casas, con las ventanas y con los jirones de nube esponjosa que aún permanecen en el cielo azul. Hay una brisa leve que me eriza la piel en los brazos. Suspiro y sonrío al ver que se ha dado la coincidencia de que todos mis vecinos han decidido tender estar tarde sus sábanas para que se secaran, y las fachadas que la persiana me permite ver son un estupendo festival de colores y estampados que bailan al viento, besados por el sol y dibujando las ondas de un mar imposible.

Tengo ganas de llorar y de reir. De saltar e inventarme un baile estúpido, de esos que hacen reir a carcajadas pero que ocultamos porque sabemos que sería ridículo si alguien nos viera. He abierto los ojos. He despertado de un letargo doloroso y apagado, gris y nublado, sin perspectivas de que saliera el sol.

Va a ser un año difícil, sí, pero, ¿dónde estaría la gracia, el reto, de lo contrario? Voy a luchar hasta que no me quede aliento. Estoy viva. Y tengo vida para regalar y sembrar. Lo vais a ver.

martes, 11 de mayo de 2010

Certezas que no necesito vivir 80 años para corroborar

- Llorar sirve de algo. A veces es una vía de escape estupenda. Otras, una vía de llegada de maravillas. ¿Cuántas cosas hermosas se han creado para y por las lágrimas?

- Las cosas y las personas no son nunca lo que parecen. Nunca. Y de ser así, probablemente se trate de una cosa.

- Puedes cambiar de opinión con el viento. O pueden hacerte cambiar de opinión, intencionadamente o no.

- Más vale solo que mal acompañado. Total, si uno mismo es tan interesante como para mantener auto-conversaciones para qué vas a complicarte con gente que no merece la pena.

- La mayoría de las cosas que merecen la pena no son ni blanco, ni negro. Y si crees que algo que lo es merece la pena, reconsidéralo, porque quizá no es para tanto.

- Es más comprensible la opción de vida de los ermitaños que la de la mayor parte de las personalidades públicas.

- Cuanto más se jacte una persona de su sinceridad, más mentirosa será. Esto es aplicable también a otras "virtudes", como la bondad, la capacidad de ser buen amigo o el "ser pobre", que parece estar demasiado en boga últimamente.

-Es certísimo que los amigos se cuentan con los dedos de las manos. Y en esos dedos incluyo familia y mascotas...así que queda claro que no quedan demasiados dedos a ocupar.

- Un porcentaje altísimo de la gente se muere de envidia hacia otra gente,la diferencia es que cada uno encauza esto como le brota.

- Si tienes algo que decir, dilo. Y si no merece la pena, mejor desahógate mediante bonitas formas artísticas...total, otra de las verdades es que la vida son dos días (si llega).

- La ley del ojo por ojo es moralmente reprobable. Pero joder,¿y lo bien que sienta?

-Si no puedes vengarte de las cosas malas que te "acontecen", espera. Suele bastar con esperar. Todo llega, por suerte.

-Para ser feliz, el hijo y el árbol son indispensables. Lo del libro...supongo que vale con componer o pintar.

- Rodéate de gente que pueda aportarte algo. Y los demás...bueno, simplemente camúflate entre ellos, al fin y al cabo no suelen darse cuenta. Es la suerte o el consuelo que nos queda.

-Los mayores placeres de la vida son gratis, aunque muchos no lo sepan. Son privilegios, además de secreto.

-La belleza de lo cotidiano y lo sencillo es la llave maestra de la felicidad.

- Unos padres magníficos, como los míos (un hermano magnífico, un entorno magnífico, un compañero magnífico, una herencia magnífica, una percepción magnífica) son el mayor regalo que existe.

[Por y para vosotros es todo. De corazón]

domingo, 2 de mayo de 2010

Feliz día, mamá

A estas alturas de mi vida (que no son alturas muy altas, todo sea dicho), tengo bastante claro que la mayoría de las personas tienen algún talento o habilidad especial para hacer cierta cosa. Algunos son hábiles con las manos, otros son capaces de expresar sentimientos riquísimos a través de la música, o la danza, o la pintura. Unos son buenos oradores. Otros excelentes amigos, o compañeros.

Pues bien, mi madre es experta en ser eso, mamá. Y no quiero decir que no sea hábil en muchísimas cosas más, sino que, además, ha nacido con la capacidad maravillosa de ser la mejor mamá posible. Porque es la persona más suave, más paciente, más inocente, más humilde y más fuerte que conozco. Porque sabe qué hacer y qué decir para sacarte de un apuro o recordarte lo hermosa que es la vida, a pesar de todo.

Me considero y siempre me he considerado una chica consciente de lo que la rodea y, aún así y en contra de lo que muchos opinan, amante apasionada de la vida. Aprecio cada bocanada de aire, cada flor, cada trino, cada persona nueva que tengo la suerte de conocer. Y, ¿cómo habría de ser posible todo ello, si no fuera gracias a mi mamá? Ella me dio el regalo más grande que nadie me ha hecho ni hará: me dio la oportunidad de nacer.

Y es que mi mamá dijo una vez "yo, cuando decidí ser madre, lo hice con todas las consecuencias. Moriría por vosotros, y también sé que mataría por vosotros". Y lo más sorprendente es que de pocas cosas en este mundo estaré tan segura como de que lo dice de veras.

Mami, gracias por todo lo que he vivido y por lo que viviré. Eres parte de cada cosa que hago y, pese a que a veces tengamos nuestras diferencias, nunca voy a olvidar lo muchísimo que me has otorgado sin esperar nada a cambio. Sé féliz, no te preocupes por nada porque la gente buena (como tú) tarde o temprano obtiene la recompensa que tanto merece. Y tendrás tu casa, tu jardín y ese rinconcito que tanto anhelas para que crezcan tus nietos (los hijos de Alonso o míos, o los de Jara, que te conocemos).

Feliz día de la madre, te quiero, mamá :)


viernes, 9 de abril de 2010

Things I've already told you

Hoy, de nuevo, siento que me faltas.
Te echo de menos como nunca (y como siempre). Necesito tu abrazo cálido y esos besos suaves que me devuelven a la realidad cuando empiezo a divagar por mundos más inhóspitos aún que el nuestro.
Después de todo, esto es obviamente amor.

No iba todo a ser tan sencillo

Resulta que se me ha vuelto a agitar algo dentro (¿o se me agitó?). Algo que creía muerto, no ya dormido.
Pero no.

Estoy asustada porque sé cómo debería fluir todo y porque sé que no ocurrirá así.

Perdida, stolen, dazed, confused, crawling. En dos.El pronóstico, reservado.

¿Y ahora? Ahora, todo igual. Todo lo mismo.

3

En ocasiones, siento que estoy vacía como un cántaro al sol. Soy liviana, y vuelo, y huelo a agua limpia y a hierbabuena.

A veces, me encuentro repleta como un manzano en primavera. Entierro los dedos en la tierra e inspiro, con los ojos cerrados. Soy ocre y tostada; soy de canela y azahar.

2

¿El olvido? El olvido no es más que un bálsamo de curandera, una pócima perfumada que trata de alejarnos de lo que nos hiere. Cuanto mejor olvidas, más sencillo es ser feliz, porque sin el plomo aprisionador de los recuerdos hasta el ave más torpe sabe volar.

Pero yo no, yo elijo recordar. Porque alejar el olvido es también la forma de devolvernos a la mente cada paso y cada lágrima, cada latido, cada suspiro. Esa gota de lluvia fría que se desliza por la mejilla y estremece los cimientos frágiles del misterio que albergamos cada uno. Y si lo olvidas, te olvidas a ti mismo y ya no tiene sentido caminar hacia ningún lugar, porque el lastre del pasado es necesario para detener la carrera inconsciente y decidir de nuevo, lentamente, un sendero por el que caminar.

1

Agua y arena danzando
fundiéndose, dos amantes.
Sudor y fuego abrazando
lo de ahora, lo de antes

Bazofia escrita en un sobre de carta sin abrir

Tengo la sensación de que se está cociendo algo dentro de mí... ebulle como una sopa, pero no tiene pinta de ser nada bueno.

Me parece hilarante el hecho de que, al caminar, dé por sentado que alguien me acecha, desde la sombra, tras de mí, a la izquierda, despacio o a zancadas.

Hace unos días que no me siento en mi sitio; quizás sólo demasiada frecuencia diaria de comedura mental.

Como si los hilillos de seda que me enlazaban al mundo que me he construido (mi parcelita de lo místico, mi entelequia abstracta carente de motivo y sentido) se fueran rasgando poco a poco. Uno tras otro. Uno por uno. Chasquidos constantes presenciados con pavor y frecuencia cardiaca creciente. And I cannot retie them.

Alguien me dijo ayer que, al fin y al cabo, estamos aquí de paso. Sea como sea, nacer y morir... al fin y al cabo, sí que lo estamos.

Y, además, concepciones erróneas del sentir (las que todos tenemos). Partiendo de la base de que pensar el sentir es estúpido intrínsecamente.

Siento que soy prescindible hasta para mí. Ya no me creo pequeñita, ni me fascino ante el mundo. O ya no constantemente. No soy nunca más de canela, ni de azafrán, ni de agua.

Siento que se acaba una etapa. Albergo la esperanza de utopía tangible.

Eso no me lo robaréis.

[Texto dedicado a una persona que probablemente nunca leerá esto; alguien con quien me siento más cercana a un nivel extraño y elevado. Y lo recordé ayer. .]

Nírë

Una de las cosas más tristes es el darse cuenta de que estás corriendo en círculos, quizás desde hace demasiado tiempo

Lo patético del escarabajo que se pone boca arriba y no es capaz de levantarse, pero a gran escala.

Lo decepcionante del tirar la toalla justo al final de un combate ganado

Y estar asustada, porque a pesar de malgastar esfuerzos en intentar reducir todo a unos y ceros, la realidad es mucho más complicada que eso. Y al salir a la calle, se te vuelve a recordar de una bofetada

(3:50 de la madrugada. Insomnio)


[Suena Extremoduro. Cuarto Movimiento de La Ley Innata]

La serenidad

El ser humano es un animal pasional, atormentado, caprichoso, sensible. Se duele, ansía, se corrompe. Lucha y desfallece, comete errores que no admite y llora. Llora sangre, sudor, lágrimas...llora sueños. Y le angustia pensar que la muerte nos sobreviene a todos, guste o no, se desee o se convierta en la quimera aterradora que te persigue en las noches de soledad.

Pero también somos mágicos. Estamos tocados por una chispa de grandeza, somos únicos y capaces de lo mejor y lo más grandioso. Porque en el principio de todo, nos besó una gotita de algo espiritual.

Y cuando esa partícula ínfima, delicada y hermosa aflora, podemos ser libres, omnipresentes y conscientes de todo. Somos entonces una pieza importante de la maravillosa red de vida que es nuestro mundo y es imposible no ser partícipe y consciente, y es imposible no reir y llorar a la vez.

Es la serenidad del ser humano cuando deja de ser terrenal y se sorprende a sí mismo


Reflexión after opening my very inner eyes

A veces te despiertas súbitamente, cuando creías llevar despierta todo el día,y descubres que esa luz que brilla dentro de ti sigue ahí, porque siempre lo ha estado. Que la belleza que la misma vida lleva implícita nunca se ha marchado, y tampoco tu capacidad para respirarla.

Porque pese a que a veces todo se te aparezca como una espiral sin sentido, como un vano borrón indescifrable, como la agonía gris de la rutina...en realidad estamos todos inmersos en la preciosa paleta de color que es el mundo, y podemos ser felices.

Porque nacemos felices, pero se nos enseña a olvidar cómo sonreir ante lo más sencillo, que al término es lo más complejo y lo más hermoso.

No dejéis de disfrutar, por favor. No os olvidéis de vivir :)

[Suena Lau; directo del 2009. The gate to Southwell Folk Festival]


Buenos días, Mundo

Quiero daros la bievenida a todos a mi blog. En él recogeré los fragmentos que voy escribiendo en pedacitos de papel, en servilletas... todo aquello que ebulle en mi interior y cuya única forma de apaciguamiento es el escribirlos. Y mostrarlos al mundo.

Me encantaría que me hiciérais llegar vuestras impresiones, si es que alguien se acerca por estos lares.

Muchas gracias por estar aquí, espero que lo disfrutéis! :)